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Un poco del principio de la dinastía mágica!

Magia !!! Aquí ahora!

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                  Caminaba tranquilo por la vida haciendo «algo de arte» léase malabares. En algún momento alguien dijo: abracadabra, ahí fue cuando me tope con uno de los primeros juegos «lindos» de magia, ahí fue cuando por primera vez vi algo que realmente no podía explicar de buenas a primeras.

Por esos azares de la vida un amigo de un amigo (según la ley matemática también mi amigo + * + = +) me mostró un «truco»de manos con monedas, «el vanidoso» era lo único que el sabia de «magia», y les diré, me costo un mundo convencerlo para que me enseñara ese juego. Hasta ahí nada nuevo no?

Esto la cuento para definir parte de la historia de cómo me transformo en mago, ¡sí! mago, ya saben, este blog da para pensar en algo completamente relacionado con un mago, onda «trucos» y formas de hacer magia, lamento comunicar que no pondré nada de eso, solo contare la historia de cómo llego a hacer magia a nivel semi/profesional (una vez un mago, ¡mago! Me dijo: yo creo la diferencia entre un profesional de la magia y un aficionado es solo el pago por el «servicio»).

Continuemos, desde ese momento dio vueltas en mi cabeza la idea de aprender algunos juegos, recordé que mi Papá me enseño como a las siete años uno de 21 cartas muy conocido por todos, nunca lo pesque mucho hasta ese momento. También Papelucho aporto lo suyo me «dio» un juego de monedas que me mostró en algún viaje a trabajar en una de las queridas micros amarillas (676).

Yerko como ¡no! cuenta en esta historia, en algún cúmplenos de mi socio le regalaron un set de magia, esto fue como a los doce o trece años, esa misma noche hicimos nuestro estreno ante el público. Haciendo memoria nos aplaudieron más por el empeño que por la «magia», fuimos un fracaso, esto lo digo con la lejanía del momento, ya que ese día fue extraordinario.

Hace unos siete años me fui a deambular por el sur chileno junto a varios amigos tocando batucada, directamente haciendo «arte callejero», para esas semanas solo tenia quince mil pesos, ósea de verda solo me alcanzaron para un par de pasajes y punto. Mi vida en términos monetarios no era de las mejores (hacer callejero ordenadamente nos daba para comer, pagar el alojamiento y guardar para los pasajes de vuelta, pero de plata para cada uno, ni hablar).

Un día de esos de poca plata en los bolsillos, una muy «buena» amiga «Silvia» me convenció de comenzar a mostrar a la gente que estaba en la playa los tres juegos que yo conocía, uno de cartas y dos de monedas, que complicado fue eso, pero fue uno de los momentos mágicos mas lindos que me a tocado.

Es ahí cuando me doy cuenta del impacto en la gente que con tres juegos «pequeños» y que me imagino no muy bien presentados, quedaba impresionada y contenta, es ahí cuando con esas «propinas» que sustentaron un verano de papas fritas y videos comienza en realidad mi sueño mágico.

Deambular mágico.

Cuando empecé a pensar en magia, fue cuando realmente apareció»…y como suele pasar, comenzó a salir de los lugares más recónditos y raros de la vida.

El pololo de una amiga de una amiga era mago «Diego», un amigo malabarista sabia algo «Arvaro» fue el primero en realmente confiar en mi, ya que me presto mi primer libro real de magia, gracias bro. En Plaza Brasil un día «x» vi al primer mago real, en ese tiempo llamado Génesis, hoy conocido como ¡Capello! Junte valor, el estaba con su polola haciendo magia y con toda la fe me acerque a preguntar como aprendió, yo a esas alturas creía saber algo, ahí me di cuenta que lo mió era básico dentro de lo más básico, el hacia «florituras» además de juegos increíbles (con las primera cartas Bicycle que veía), ese día quede rayando la papa, lo triste fue que solo me dio un par de datos, pero de magia nada, yo dije este «Ctm» pero bueno fue el inicio.

Uno de los consejos de Capello fue que alrededor del parque forestal se juntaban «algunos» magos. Comencé a buscarlos, los vi jugando Poker en una esquina de las bancas del «fore», tres amigos de buen nivel y chistosos, pero me demore un año para ganar su confianza, después de ese año por fin me enseñaran algo, solo me acuerdo de dos de sus nombres «Cristóbal» y «Raúl» el otro lo deje olvidado en algún cajón! del Parque Forestal.

De ahí en adelante se simplifico un poco, los libros llegaron y comencé a aprender algo de manejo de escenario e intente desde ahí desarrollar el personaje y mi magia.

Las horas en las bibliotecas, el constante deambular por cientos de librerías, las largas caminatas en San Diego o El Bio-Bio buscando libros, los miles de fracasos para aprender o entender, más los pequeños juegos errados, me comenzaron a dar confianza, el apoyo sin condiciones de Karina más los amigos que tenían ganas suficientes para ver juegos y juegos y así para ser de alguna manera los tester, los primeros en creer en la ilusión!…

Gracias a mi mundo gracias a los que creen.

El mago

La magia en mis venas-

2 respuestas a «Un poco del principio de la dinastía mágica!»

interesante tu deambular por la magia…. me gusto… a todo esto que es «florituras» ??? creeme que jamas habia escuchado o leido esa palabra…

((((PAP))))

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